Las reinas
malditas, de Cristina Morato. Editorial Plaza&Janes
Sinopsis de la
editorial:
Excéntricas, caprichosas, rebeldes, ambiciosas... Más allá de un mundo de privilegios, riqueza y poder, todas fueron mujeres de carne y hueso obligadas a llevar sobre sus hombros la pesada carga de un imperio.
La vida de estas reinas dista mucho de ser un romántico cuento de hadas. Aunque infinidad de películas y novelas nos han mostrado el rostro más amable de su reinado, en general, fueron muy desdichadas. Todas tienen en común la soledad, el desarraigo, la nostalgia, la falta de amor o el sufrimiento por no poder dar un heredero al trono. También comparten la dolorosa pérdida de sus hijos, los fracasos matrimoniales o el sentirse extranjeras en una corte donde no eran bien recibidas.
Las suyas no fueron grandes historias de amor porque sus matrimonios eran un «asunto de Estado». Algunas, como Sissi, fueron emperatrices en contra de su voluntad y enfermaron de melancolía; otras, como Cristina de Suecia, escandalizaron con su extravagante comportamiento y sus ansias de libertad. María Antonieta y Alejandra Romanov comparten un trágico final, mientras que la reina Victoria de Inglaterra y Eugenia de Montijo asumieron con extraordinaria dignidad su papel en los momentos más difíciles.
A través de los diarios personales y correspondencia familiar, Cristina Morató nos descubre el lado más humano y menos conocido de unas reinas y emperatrices, maltratadas por la historia, que no pudieron elegir su destino.
Biografías de las reinas Emperatriz Sissi, María Antonieta, Eugenia de Montijo, Alejandra Romanov y otras, la autora a ser periodista documenta la narración con diarios personales, cartas y opiniones de otras personas cercanas a la historia.
Ha sido la lectura de mayo del ClubBooklover (Elena de Pegapapelotijeras, Dalia y Nayat )
Llego a la conclusión después de esta lectura que no me gustan la biografías sino esta noveladas o son novelas gráficas. Las que he comenzado en estos últimos años que recuerde así por encima; Fouché: retrato de un hombre político, de Stefan Zweig; Juan Belmonte, matador de toros, de Manuel Chaves Nogales; Limónov, de Emmanuel Carrère; incluso la que termine La condesa sangrienta, de Valentine Penrose son historias narradas por grandes escritores, que ese no es ese el problema, pero echo en falta para que a mí me llegue o me quede con algún dato de los que me cuentan. Todas estas lecturas me han llegado por lecturas de club de lectura o escritura, porque yo por mi misma no es una lectura que busque.
Con estas historia de no ficción que cuenta las historias de varias reinas me pasa igual. A no ser que te interese
personal una de ellas no le busco sentido leerlas de seguido. Me ha constado
centrarme en las historias. Podría analizar una por una, pero es que creo que
son personajes históricos que están desvirtuados por películas o historias románticas, y el saber datos personales de ellas, no me hace que cambie de opción sobre reinas, que siga pensando que son
personas que contaban con unos privilegios, aunque no con la libertad de poder
decir sobre detalles de su vida ¿pero quién puede?
Es por tanto
lecturas para debatir en club de lectura o escritura o porque a nivel personal
te interese la persona o el personaje.
Por el contrario,
las ultimas novelas gráficas de biografías de personajes publicos e historias noveladas sí que me han gustado. Poco más que aportar.
La autora en este
caso al ser periodista documenta los fragmentos con cartas nos solo de las
protagonistas sino de otras personas de alrededor para dar una visión más
amplia de las reinas, sus patologías y su situación sociopolítica, familiar y
emocional.
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