“El
Barco”, de José María “Tate” Montoya.
Ediciones Alfar.
Este
libro me llego por un sorteo que hizo la editorial y lo he leído hace unos
meses ¡Gracias Alfar!, son de esos libros que tengo pendientes de reseñar
porque no creo que tenga que aportar nada nuevo mi opinión sobre la novela en
sí, pero me acorde de esta novela hablando con Luis y comentando cosas sobre la novela realista; él me recomendaba “Peñas Arribas”,
de José María de Pereda, novela que no he leído y queda pendiente. Intentando
pensar alguna del estilo, de lo poco que he podido entender del encuadre de
este estilo de novelas me acorde de “el barco” por lo que voy a intentar
termina correctamente la opinión de esta novela.
La
sinopsis del libro de la editorial:
El barco es la historia de los cientos de trabajadores que hoy en día navegan en la desesperanza de los problemas laborales, del paro... Es la historia de aquellos enfermos y sus familiares que navegan perdidos en los mares internos de la mente.
Pero
en las historias que cuenta lo de menos creo que es el barco, no es un historia de marineros ni tampoco las
vidas de los personajes se centran en su trabajo en ese barco que se menciona,
en todo caso podría representar la llegada de la novedad, la esperanza, el
avance tecnológico, etc. Un una ruptura de la monotonía y la esperanza que el
barco venga cargado de lo que se necesita en ese momento a modo de “un barco
cargado de…”
No
soy seguidora de programas televisivos, me sacas de series y películas y ando
perdida, por lo que la figura del autor es su faceta artística en televisión y
cantante poco me complementa la información de la novela. Sí he descubierto un
Tate Montoya con una narración, que a pesar de vicisitudes
de las vidas que narra, encuentra una migaja de alegría y optimismo que llena
día a día el seguir con la vida los personajes, y quizás en eso consiste la
existencia humana.
Es
una novela con pasajes no lineales que comienza contando la enfermedad de su
madre y con ella regresa a vivencias pasadas. Una España de posguerra, llena de
trabajadores, en donde cuentan su vida y sus ilusiones: comer, llegar a fin de
mes y algún arrumaquillo.
Es por lo que me acorde de la novela realista porque
son capítulos de la vida en la que hay cabida desde la visita por la entrada de
urgencias de un hospital público, algo que actualmente tiende a desaparecer, a
un Golpe de Estado, que es por donde pueden reventar la crisis, y el día
a día de unos trabajadores de un taller mecánico.
A pesar de que no me gustan las
historias basadas en hechos reales es un repaso a fiestas y lugares interesantes
de nuestra geografía.
Una
idea que aparece en la novela de sabiduría popular
"si
a los cuarenta no eres rico, arre so
potrico"
Santa María de la Mesa |
Cristo de Burgos, de Ballurca |
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