Cupido, tenemos que hablar

 

    Cupido, tenemos que hablar, de Elena García. Tentación editorial Tentación editorial. 

    Sinopsis de la editorial:

Mi nombre es Valeria y acabo de romper con mi novio delante de toda su familia cuando se suponía que anunciaríamos nuestro compromiso, y, para colmo, es el día de los enamorados. ¿Se puede caer más bajo?

Al parecer, sí, porque mis amigas me sacaron de fiesta para olvidarme del dolor y acabé en la cama de un Cupido francés con cuerpo de dios griego.

¿Qué quién es Cupido? Ojalá lo supiese porque me urge hablar con él sobre el pequeño regalo que me ha dejado y que llegará en menos de nueve meses a mi caótica vida. Por suerte, tengo unas amigas tan maravillosas como locas que me apoyan y no han dudado en ayudarme a localizarlo.

¡Francia, allá vamos!

 

    Podéis encontrar la novela para comprar  AQUÍ 

    Me llego estar lectura a través la colaboración que ofrecían en el Instagram de la editorial Tentación.

    El genero de novela de comedia romántica no es mi lectura habitual pero siempre cae de vez en cuando el tomar una lectura desestresante, de estos encuentros casuales entre la tensión sexual y romanticismo donde el drama es el punto de partida, donde el autor da un giro a la situación absurda acompañado de malas decisiones y sale un cocktail entretenido. Sin embargo, películas y series del género si soy asidua.

    La sinopsis de la novela ya nos da muchas pistas, y se ajusta al estereotipo de comedia por escenas aderezadas con el toque español lúdico, en alguna escena escatológica, y los giros esperados e inesperados de encuentros y distanciamiento de los protagonistas.

    En resumen, es una lectura que da lo que esperas, ágil, diálogos fluidos, escenas rápidas y visuales con pasión y tensión sexual en su justa medida.

    No destripo el argumento, que ya nos lo dijeron, Valeria termina malamente con su prometido. Las buenas amigas y compañeras de piso, cada una en su estilo, están ahí dándolo todo para llevársela de fiesta. Es el hombretón buenorro con el que se cruza el día de San Valentín quien la dará un regalo, que no esperan, y por eso que tenga que volverse a cruzarse.

    Los personajes están bien argumentados, cada uno con su personalidad y su trabajo, condición económica y su aportación física. Prima la apariencia, pero si quieres ahondar en el comportamiento de cada uno de ellos, puedes encontrar argumentos en pro y en contra de determinadas practicas empresariales, a favor de la adopción animal y el respeto como también la tolerancia hacia un sistema de consumo y explotación, autogestión e independencia individual y laboral frente a la aprobación familiar y social.

    Hay un viaje por parte de Valeria y sus dos amigas hacia Marsella, Francia, y traslados a eventos, pero no calificaría la historia como una road movie aunque si tiene también elementos, también hablamos de un novela en digital de 331 paginas que queda adecuada a los tiempos.

Puerto de Marsella