martes, 16 de enero de 2024

Las mujeres Weyward

 



    Las mujeres Weyward, de Emilia Hart. Umbriel. Traducción de Xavier Beltrán.  

Sinopsis de la editorial:

«Intentaron encerrarnos. Pero una mujer Weyward tiene una naturaleza salvaje en su interior. Nadie nos va a controlar».

2019: Kate se marcha de Londres y lo abandona todo para mudarse a la cabaña Weyward, que ha heredado de su tía abuela. Con sus cascadas de hiedra y su jardín descuidado, la cabaña está a un mundo de distancia de la pareja abusiva que la atormentaba. Pero Kate empieza a sospechar que se esconde un secreto en los cimientos del lugar, oculto desde las cazas de brujas del siglo XVII

1619: Altha se enfrenta a un juicio por el asesinato de un granjero del pueblo. De pequeña, su madre le enseñó magia, una basada en un conocimiento profundo del mundo natural. Pero las mujeres peculiares siempre han sido consideradas peligrosas, y cuando se presentan pruebas de su brujería, sabe que necesitará todos sus poderes para mantener la libertad.

1942: En medio de la Segunda Guerra Mundial, Violet está atrapada en la gran finca de su familia. Atrapada por las convenciones sociales, desea dos cosas: la educación que su hermano recibe y a su madre, fallecida hace tiempo, que se dice que enloqueció antes de morir. El único rastro que Violet tiene de ella es el medallón con una W y la palabra «Weyward» grabada en el revestimiento de su habitación.

    Con el cambio de año, cambio de el diario de lecturas, no quería hacer una previsión de lo que leeré para que no me pase lo del año pasado, que no pude leer con buenas condiciones y menos reseñar y opinar, así que, de los resúmenes de otros, las cosas que he ido apuntando a lo largo del año 2023 y pendientes, irán saliendo las lecturas de este año, sin presión. Me prestaron esta novela, que estaba apuntada, así que avanzo con ella. Esta lectura llego así.

    Nuevamente la historia de tres mujeres, pero a diferencia de la novela anterior, nuestras protagonistas son de una misma familia en diferentes épocas históricas. Una secuencia se repite; son perseguidas, maltratadas y estigmatizadas por el hecho de ser mujer. Altha que es acusada de brujería, que era un de las partes que me atraía de la novela, me esperaba más detalles de novela wiccas y brujas, al final no ha sido tanto si no que se ha dirigido más a una fantasía o comunicación mística con la naturaleza que tiene ese toque místico que me ha gustado.

    Violet esta limitada por su género en una sociedad en la que no se le permite el acceso a un educación, medios y libertad de la que tendría que gozar al estar dentro de una familia acomodada. Sí, he sido clasista en este comentario. La falta de información sobre la vida la convierten en una victima culpabilizada y expulsada.

    Kate mujer actual, con una vida más contemporánea, y subyugada al mismo tipo de violencia, pero menos visible. La culpabilidad esta tan integrada en ella, que incluso se aleja de sus motivaciones y su pulso anímico. A día de hoy es esta violencia la que estamos a tiempo de evitar, identificarla, superarla y libertarse realmente de estos comportamientos dañinos y malos en todas sus formas.

    La novela arranca con este drama y evitas abandonar la lectura porque dices, no, esto no la puede estar pasando. ¡A ella! Cuando es, igualmente, no entendible, que le pase a NADIE.

    Así que me quería encontrar con una novela de brujas buenas y me encuentro con una somanta de hostias. La recomiendo porque hay partes muy bellas en el descubrimiento de la naturaleza, el hilo conducto que la autora consigue y la complicidad entre todas ellas, para que Kate vaya descubriendo la historia de sus antepasados a medida que también se nos desvela al lector. Hay adrenalina en unas escenas, venganza en otras, todo con un toque mágico y de emoción hacia la naturaleza y un tipo de conocimiento que no se debe de perder.  

    También me parece preciosa la portada, y todas la imágenes que se recrean de pájaros e insectos. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario